8- POR FIN LLEGÓ EL AMOR

Madre mía, pobre chico, parecía que iba a explotar. Estaba más rojo que un tomate y sudaba. Intenté calmarle:

- Mira Harry, supongo que ya sé de lo que quieres hablar a sí que, para ahorrarte este sufrimiento- le sonreí- empezaré yo. Desde el día que te vi en el cine me pareciste... guapo. Vi que me guiñabas el ojo y en ese momento me hice demasiadas ilusiones. Al rato medité y me dije a mi misma que no, que no me podía enamorar de ti. Lo primero porque era imposible que tu sintieras lo mismo, lo segundo porque eres famoso y yo no llevo muy bien todo ese mundo de los fotógrafos y las fans y tercero porque soy una chica cualquiera y tu eres Harry Styles. Luego te tiré el vaso de agua en clase y te dije todas esas cosas horribles que no pensaba de verdad... Después los chicos vinieron a hablar conmigo y me contaron lo del concierto, lo de los comentarios de Twitter y me sentí fatal y fue cuando me fui a tu casa a disculparme. En ese momento estaba confusa, porque sólo me abrazaste y me dijiste que me fuera... Desde ahí empecé a pensar que yo claramente no te gustaba y dejé a un lado mis sentimientos que me forzaban a... quererte. - en ese momento Harry me miró con un brillo en los ojos, supongo que de felicidad- y bueno... he vuelto a recuperar la esperanza desde que Louis me dijo en el hospital que te gusto.- me puse roja y él también.
Pasaron 10 largos minutos, nadie dijo nada. Tan sólo cruzábamos nuestras miradas de vez en cuando. Por fin, me atrevi a decir:
- Bueno... entonces... ¿ Yo te gusto ?
Harry suspiró, me miró directamente a los ojos y me dijo:
- ¿ En serio me preguntas eso? Pues claro que me gustas. Desde el día del cine no he dejado de pensar en ti, no podía dormir, porque pensaba: "Nunca volveré a verla" pero entonces los chicos me dijeron que no me rindiese, que investigara y que hiciese algo para encontrarte. Descubrí que ibas al instituto Sherville y no dudé en matricularme allí. Llegamos a clase de ciencias y justo había un sitio a tu lado, una oportunidad perfecta para hablar contigo por fin. Pero entonces, no sé qué me pasó, me puse muy nervioso. Me comporté como un auténtico idiota, me lo tenía demasiado creido, y vas tu y me tiras el vaso de agua. Yo también perdí las esperanzas y me culpaba a mí mismo por haberme comportado así contigo. Necesitaba pensar a solas un tiempo y me fui a casa. Entonces, al rato, llegas tú. Te disculpas y me abrazas. En ése momento yo no sabía qué hacer, estaba confundido. Después ocurrió el accidente de Louis... Pero perdí totalmente la esperanza cuando, justo cuando yo iba a hablar contigo, salgo y te veo abrazada a Liam. No me lo podía creer. Lo único que hice fue llorar, pero tu volviste a aparecer para disculparte. No digo que sea culpa tuya, porque solo estaba consolando a un amigo, pero me destrozó ver aquello...