4- LA BÚSQUEDA

Volví a mi casa algo disgustada. ¿ Harry me había perdonado o no? Estaba confusa...  

Sé que le sentó fatal todo lo que dije, que no debería de haberlo hecho, pero en ése momento sentía rabia, estaba enfadada con él porque se comportó así conmigo, y supongo que, después de todo lo que le dije, él también sintió rabia. En cuanto entré en mi habitación, me puse el pijama y me tumbé en la cama. Estuve un largo rato retorciéndome en la cama. No podía dormir, dándole vueltas a lo que había ocurrido hoy con Harry y los chicos de One Direction. Al fin, el sueño me venció y me quedé dormida. 

A la mañana siguiente mi madre vino alarmada a despertarme porque aún no me había sonado el despertador y llegaba tarde. Pensé que tenía que hablar con Harry lo antes posible, así que me vestí y desayune rápidamente para llegar a tiempo al instituto. 

Por el camino pasé por delante de la casa de Harry y llamé para ver si aún estaba en casa, pero su madre me abrió y me dijo que ya se había ido. 

Llegué al instituto y no les vi en toda la mañana. A la hora del almuerzo fui a buscarlos a la sala reservada para profesores y directores, pero el profesor Grasto, mi profe de mates, me dijo que hoy no había ido ninguno de los cinco. Me extrañó mucho, asi que a la salida volvi a casa de Harry y su madre me volvio a abrir, pero esta vez me dijo que había pasado un momento por casa y que se fue a casa de Liam. Como me estaba desesperando le pedi la dirección de la casa de Liam. Llegué allí y era otra mansión, algo más pequeña que la de Harry, pero a mí me seguía pareciendo enorme. Llamé al timbre y pasaron al menos 10 segundos antes de que alguien se molestase en abrir la puerta. Me abrió una mujer de aspecto simpático. Era rubia, menudita y con gafas. Supuse que era la madre de Liam. Le pregunté por él y por los demás chicos de One Direction, y  me dijo que estaban en Nando's tomando unas pizzas. Estaba harta de andar de aquí para allá sólo por hablar con ellos. Le dije a la madre de Liam que cuando volvieran me avisase. 

Como decidí dejar de buscarles, me fui a casa. Al llegar encontré una nota en el buzón. Era de Harry. Quería hablar conmigo y estuvo buscándome por todas partes y no me encontraba. Me reí al leer la nota, porque yo también le estuve buscando a él y a los demás. Entré en casa y mis padres me miraron con cara rara y me dijeron:

- Esta tarde ha venido un chico preguntando por ti... Se llamaba Harry, creo.- me dijo mi madre.

Yo, avergonzada y colorada me fui corriendo a mi habitación. Odiaba hablar de esos "temas" con mis padres. Cuando subí a mi habitación cogí el ordenador y abrí el Twitter. Los chicos de One Direction me seguian y mis seguidores subían por momentos gracias a ellos. Me parecía raro. Desde siempre me han caído mal y , ahora, casi eran amigos míos. 

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Al día siguiente, de camino al instituto, me encontré con los chicos y cogí del brazo a Harry, quería hablar con él. Seguía sin mirarme a la cara, pero en seguida, los dos a la vez, nos dijimos:

- Ayer estuve buscándote. 

En ese momento los dos nos miramos y nos empezamos a reír. Seguimos de camino al instituto y al llegar vimos a todos con la boca abierta, paralizados, y gritaban a la vez:

- ¿¡ Por qué !? ¡Noooooooooooooooooooooooooooooo!-